De todos es sabido la peligrosidad de la exposición prolongada a los rayos del sol. En la época estival siempre nos entra la preocupación por las quemaduras solares, a las que intentamos poner remedio una vez han sucedido. Pero el mejor sistema es la prevención, pero tanto en Invierno como en verano, y más en un clima como el nuestro, donde predominan los días de sol.
Es fundamental protegerse del Sol, y lo es hacerlo todos los días y todo el año. No vale con protegernos sólo durante el período veraniego, que es cuando la creencia popular dice que hay que hacerlo. Nuestra piel está expuesta al sol todo el año, es por ello que antes de salir de casa debemos protegernos con una buena crema protectora. Nuestra piel lo agradecerá y los síntomas de envejecimiento celular serán mucho más tardíos, así como evitaremos, en gran medida, las lesiones cutáneas, que pueden derivar en complicaciones graves.